Peñíscola ofrece una especial combinación entre patrimonio natural e histórico que es difícil encontrar en otros lugares. Sus reliquias medievales, como el Portal Fosc, o sus playas y calas recónditas, son el mejor ejemplo de ello. Sin duda, una visita a esta localidad puede ser el punto de partida de tus mejores vacaciones. Para demostrártelo, en este artículo te explicaremos qué ver en Peñíscola.

Planea tus próximas vacaciones: 6 sitios que ver en Peñíscola

Si tu intención es pasar unos días en Peñíscola para desconectar, nuestro consejo es que lo hagas entre los meses de abril y septiembre, que es cuando el clima es mejor. Este pueblo es un destino ideal para pasar tiempo en familia o planear una escapada con amigos. Te mostramos qué visitar en Peñíscola para que no te pierdas nada.

1. El Bufador

La simbiosis entre el entorno natural y humano de este pueblo es impresionante. El resultado de esta combinación se ve reflejada en espacios únicos en medio de sus calles empedradas, como sucede con el Bufador. Este agujero natural entre rocas da directamente al mar y permite escuchar el rugir de las olas.

Este enclave tan sencillo es, paradójicamente, uno de los principales atractivos del pueblo. El ruido que se puede percibir es único, como así lo afirman quienes han visitado esta localidad.

2. Portal Fosc

En la antigüedad, Peñíscola era una ciudad medieval rodeada por una muralla para defenderse de las constantes invasiones. Hoy en día, aún se conservan reliquias de una época en la que los caballeros y los templarios eran parte de la sociedad. La más importante es el Portal Fosc, que servía de entrada principal al pueblo.

Fue levantado en el siglo XVI y, como curiosidad, fue uno de los escenarios de grabación de Juego de Tronos. En español, significa Portal Oscuro, y su sentido se refleja fácilmente desde que lo cruzamos. Este da acceso a una galería en la que la luz brilla por su ausencia que conduce al Cuerpo de Guardia.

3. Casco antiguo

Si quieres conocer el pasado más reciente de esta localidad, te recomendamos que pasees por su casco antiguo. Comienza en la calle San Roque, una de las más admiradas por los turistas y habitantes de Peñíscola. Su especial contraste entre fachadas de color blanco y jardines coloridos es digno de admirar.

Lo que más gusta son sus calles empedradas que conducen a una red de vías antiguas en las que puedes darte el gusto de perderte. Déjate llevar por sus especiales paisajes y aprovecha para tomar fotos.

4. Playas Norte y Sur

Cuando contemplas una panorámica del pueblo, lo más reconocible es su peñón, sobre el que se asientan numerosas casas. Este divide la costa de Peñíscola en dos, con playas que se denominan del Norte y del Sur. Cada una posee una belleza admirable, pero son radicalmente opuestas entre sí (a pesar de estar tímidamente separadas).

La playa Norte es la más grande, con 5 kilómetros de longitud, la más visitada y cuenta con múltiples servicios de ocio y actividades acuáticas. Incluso puedes hacer paddle surf o buceo si quieres vivir nuevas experiencias. Por su parte, la del Sur mide solo 300 metros y es muy tranquila. Una de las mejores cosas que ver en Peñíscola si quieres relajarte.

5. Castillo del Papa Luna

También conocido como castillo de Peñíscola, fue construido por los templarios en el siglo XIV. Hasta entonces, esta fortaleza era usada por los árabes durante al-Ándalus, aunque fue reconvertida para albergar las dependencias del Papa Luna. Su nombre real era Benedicto XIII, y decidió asentarse aquí en una época de inestabilidad en el cristianismo.

En la actualidad, se pueden visitar todas sus estancias para conocer cómo era la vida papal en la Edad Media. Sin duda, una oportunidad estupenda para contemplar de cerca el papel predominante que tuvo la iglesia en la sociedad de entonces. No te vayas sin recorrer su Salón Gótico o el Patio de Armas, que se mantienen casi intactos después de más de 700 años.

6. Sierra de Irta

La sierra de Irta es uno de esos lugares que dan cuenta de la especial naturaleza de esta localidad. Se sitúa justo al sur y ejerce de frontera natural, aunque guarda un secreto que los turistas suelen dejar atrás. Sus calas son el principal atractivo, pero tendrás que buscar bien, ya que están muy escondidas.

Nuestro consejo es que planees una excursión de senderismo por algunas de sus rutas. El sendero PR.V-194 se extiende a lo largo de 26 kilómetros y es uno de los más populares.

Llegados a este, esperamos haberte ayudado sobre qué ver en Peñíscola. Este pueblo será el lugar ideal para organizar unas vacaciones que nunca olvidarás, sobre todo, si las planeas en compañía. ¿Te gustaría disfrutar de los encantos de esta localidad? En Orange Costa, contamos con múltiples opciones de alojamiento. ¡Visita nuestra web!